Iker Martinez: "'Sacrificio' y 'mucho trabajo' son las palabras que mejor definen nuestra primera mitad de vuelta al mundo"
El patrón del “MAPFRE” volvía a la etapa más larga de la Volvo Ocean Race. Desde Brasil, después de sumar un brillante segundo puesto en la etapa reina de la vuelta al mundo, hace balance de ésta y de la primera mitad de regata.
¿Cómo ha llegado el barco a Brasil después de una etapa tan dura?
Ha llegado bien, pero tocado y hay un montón de detalles en los que tenemos que trabajar. Ha sido una etapa dura y hemos llegado, pero no se nos ha caído el palo abajo de milagro porque las piezas que sujetan las crucetas estaban rotas en los dos lados, lo que quiere decir que cuando el palo tendía a flexarse, las crucetas seguían funcionando, pero si llega a haber sido hacia el otro lado, hacia proa, no habría sujetado el mástil y se habría roto. Hemos tenido suerte porque además de todo eso, a día de hoy, había dos palos de repuesto y los dos se han utilizado [uno lo tiene “Vestas” y otro lo utilizará “Dongfeng”], así que no es que rompas el palo y pierdas la etapa, sino que igual te tienes que quedar en casa porque no hay otro palo. La regla One Design tiene cosas muy buenas, la mejor que estamos llegando todos muy juntos, pero luego gestionar todo eso en la práctica es muy difícil.
La anterior etapa no pudiste hacerla por tus compromisos con la campaña olímpica en Nacra 17, ¿cómo ha sido la vuelta al “MAPFRE”?
La verdad es que el hecho de seguir la regata desde fuera me ha permitido ver el barco de forma diferente y ver el equipo desde fuera. La primera vez que fui a casa fue después de la segunda etapa y, aún estando muy ocupado con la clase olímpica, fue la primera ocasión desde que empezamos con el proyecto para sentarme y pensar "Vale, ¿dónde estamos? ¿Qué podemos hacer para ser mejores?". Creo que fue positivo.
A toro pasado, ¿cambiarías algo de lo que habéis hecho durante la etapa?
Ahora, con el conocimiento que tenemos, sí. En su momento, si volviese a estar en la misma situación y sin saber lo que sabemos ahora, creo que volveríamos a tomar las mismas decisiones. Cada vez vamos aprendiendo más, sobre todo en cuanto a cómo navega el barco, cómo se comporta con las diferentes velas y cómo utilizar todo eso mejor. Sobre todo hemos aprendido dónde está el límite del equipamiento.
¿Cuál crees que fue vuestra mejor decisión?
¡Es difícil saberlo! Es mucho más fácil saber cuál no fue la buena y hubo un par de ellas que no lo fueron. Normalmente no recuerdas demasiado las buenas decisiones, recuerdas las malas.
¿Cómo describirías esta primera mitad de la vuelta al mundo?
Como muy dura, porque hemos tenido que hacer un aprendizaje muy grande compitiendo, que no es lo ideal. Hemos ido resolviendo problemas a lo largo del camino, así que yo creo que las palabras que mejor la definen son “sacrificio” y “mucho trabajo” para poder tener el aprendizaje suficiente para llegar a un nivel comparable al de los otros equipos en un periodo de tiempo mucho más corto.
¿Cómo enfocáis lo que resta de Volvo Ocean Race?
Después de dos podios en un total de cinco etapas, nos asentamos un ‘poquito’ más pero la diferencia es tan mínima y todos vamos aprendiendo tan rápido que con el mismo nivel que hemos tenido en esta etapa en la siguiente podríamos ser quintos o sextos.
Nuestra mentalidad es ir etapa a etapa y seguir aprendiendo. El único objetivo que nos podemos marcar es seguir mejorando, y mucho, y para ello no hay que pensar a largo plazo sino a corto plazo. Ahora tenemos una etapa, hemos tenido los problemas que hemos tenido, se ha caído el palo de otro barco, ha habido una rotura de un timón en otro, ciertos problemas en el equipamiento, hemos tenido roturas de velas… Ahora estamos buscando soluciones para todos esos problemas e intentar entender qué es lo que ha pasado para ser más efectivos.
En Auckland, tu compañero Xabi Fernández ya adelantó que no estarás a bordo en la próxima etapa pero regresarás para la séptima, entre Estados Unidos y Portugal, ¿cuál es tu plan con el Nacra 17?
Vuelvo retomar el trabajo que hicimos durante la etapa tres y cuatro, que fue muy difícil: vuelta a empezar con el equipo, con una tripulante diferente y todo el equipo diferente… Ahora tenemos que dar continuidad a ese trabajo e intentar seguir aprendiendo y conseguir formar un equipo competitivo, que por el tiempo y las limitaciones que tenemos en los recursos, es algo muy complicado; por ejemplo hemos perdido el entrenador, que está ahora con Fernando y Tara, y han cambiado mucho las cosas. El objetivo es hacer un grupo sólido para poder ya empezar a trabajar de una manera más estable. En cuanto a regatas, estaremos en Hyères.